Puro arte en el tablao

Soledad de José Sarró es una de las bailaoras flamencas que forman parte del elenco de artistas de El Palacio Andaluz. Bautizada artísticamente como ‘Soleá de José’, nombre que hace honor a uno de los estilos flamencos con los que se siente más identificada, la soleá.

Nacido en Bormujos (Sevilla), su idilio con el flamenco comenzó a los cuatro años. Su madre le apuntó a una academia para aprender sevillanas y desde entonces su vida ha estado ligada a este arte. Es licenciada en Danza Española por el Conservatorio de Sevilla. Actualmente prepara el Grado Superior en el Conservatorio Superior de Danza Ángel Pericet de Málaga, formación que compagina con los estudios de Grado Superior en Educación Infantil.

A pesar de su juventud, Soleá de José ha participado en diferentes espectáculos y recorrido escenarios de Madrid, Barcelona y varias ciudades andaluzas. Con tan sólo 13 años se marchó a Alemania, donde estuvo más de un año bailando en diferentes tablaos y locales alemanes. Desde 2017 está vinculada a El Palacio Andaluz, donde interpreta varios palos flamencos, solo con palillos y piezas del clásico español.

Dicen de ella que es una bailaora elegante y con presencia en el tablao. Ella también lo parece y, además, reivindica el papel de las castañuelas en el flamenco porque es un instrumento al que dice «se le puede sacar mucho partido y enriquecer este arte».

Admira a Belén López, Águeda Saavedra, Pastora Galván y Matilde Coral, a las que considera un referente en el baile flamenco. Amante y defensora del flamenco tradicional, a esta bailaora le encantaría dedicarse a la enseñanza una vez que deje los tablaos.

A Soleá de José hay que verla sobre el escenario. Con y sin palos. Es puro arte.